Las habilidades de comunicación son la base del bienestar en la escuela. Si no, que se lo pregunten a todos esos directores de escuelas que tienen problemas para hacerse entender entre tu equipo docente, o a todos esos profes que se callan lo que piensan día sí día también….
Cuando no nos comunicamos eficientemente, el ambiente se tensa. Ya sea porque no sabemos hacernos entender, o porque no entendemos.
El caso es que tener presentes las habilidades de comunicación que necesitas para desenvolverte en tu centro educativo será muy positivo para tu desarrollo profesional, y para fomentar el bienestar para ti y para los que te rodean.
Toma nota de 5 de las habilidades que más destacan y comienza a practicarlas.
5 Habilidades de comunicación básicas para equipos gerentes de escuelas y docentes
#1 – Escucha activa
Comenzamos con el pilar de toda comunicación efectiva, y es saber escuchar.
En este sentido, hay que saber diferenciar entre oír y escuchar. Y es que no se trata de estar delante de la otra persona sin más, y mientras habla tú pensar en otras cosas (en lo que vas a contestar, en la tarea pendiente, en el mensaje del móvil…).
La clave es escuchar activamente.
¿Y qué es esto de escuchar activamente? Se trata de poner toda tu atención en lo que te están diciendo, trayendo tu mente y tus pensamientos al aquí y ahora.
¿Y qué no es escuchar activamente? Pues distraerse durante la conversación, interrumpir al que habla, contar tu propia historia en vez de escuchar la suya…. Seguro que son situaciones que te suenan y que has vivido, tanto de un lado como de otro.
Así que te invito a empezar a practicar la escucha activa, poniendo todo de tu parte para tener presencia plena en la conversación.
CÓMO PONERLA EN PRÁCTICA
La próxima vez que estés escuchando a alguien, detecta si tu mente está a lo que te está diciendo o está en la contestación que le vas a dar, en lo que te pasó el otro día a ti o en lo que vas a hacer de cenar hoy.
Trae tu atención al momento presente. Un truco que funciona es ponerle toda tu atención a tus talones, sentirlos, y traer tu mente al aquí y a lo que te están diciendo.
#2 – Lenguaje no verbal
Gran parte de lo que se interpreta en una conversación viene del lenguaje no verbal. El tono y el volumen de la voz, así como los gestos y las posturas, dicen mucho.
De hecho, muchas veces podemos saber si alguien nos está escuchando activamente simplemente observando su lenguaje corporal.
En la mayoría de las ocasiones se trata de algo inconsciente, pero en cualquier caso hay que tratar de cuidar y desarrollar este tipo de lenguaje.
Por ejemplo, manteniendo contacto visual con la otra persona, teniendo una postura erguida y cuidando el tono de voz.
También es útil saber interpretar el lenguaje no verbal de tus interlocutores para poder desenvolverte mejor en las conversaciones.
CÓMO PONERLO EN PRÁCTICA
En este punto es clave prestar atención a detalles que tal vez han pasado desapercibidos hasta ahora, como fijarte en los gestos que haces cuando hablas con alguien o la postura que tienes cuando escuchas (por ejemplo cruzas los brazos o miras constantemente el teléfono móvil).
#3 -Validación emocional
La validación emocional es el complemento perfecto para la empatía, porque no se trata sólo de comprender lo que la otra persona siente, también es preciso aceptarlo, sin juzgar, aunque no estés de acuerdo.
La validación emocional es positiva en el proceso de comunicación porque permite que el otro interlocutor se sienta reconocido y validado, con lo que es más probable que se siga verbalizando lo que le pasa por la cabeza.
En realidad, tiene un efecto de generar confianza, y la confianza es básica para que se dé una comunicación efectiva.
CÓMO PONERLA EN PRÁCTICA
Para aprender a dominar la validación emocional, es necesario partir de la idea de que todas las emociones tienen sentido y son válidas.
Las emociones que sentimos son entendibles dentro de nuestra historia y/o contexto, y por eso no debería ser nuestro objetivo juzgar o tratar de cambiar las emociones de otros, si no más bien aceptando la experiencia emocional del otro.
#4 -Resolución de conflictos
El conflicto es inevitable. Al final siempre habrá diferentes formas de pensar o de enfocar un asunto que chocará con otro.
Por eso, una habilidad de comunicación básica es aprender a manejar estos desacuerdos y negociar de una manera sana para las dos partes.
Y es que cuando no sabes resolver conflictos, terminas evitando afrontar situaciones incómodas que lo único que hacen es provocar resentimientos, una actitud defensiva y malos entendidos.
Así que para evitar este mal ambiente en tu escuela, es imprescindible aprender a encontrar soluciones pacíficas a los desacuerdos que se den.
CÓMO PONERLA EN PRÁCTICA
No hace falta esperar a tener un conflicto para practicar esta habilidad. Puedes plantear un escenario imaginario o recordar uno pasado, y tratar de pensar cómo podrías resolver el conflicto de forma pacífica.
Por ejemplo, manteniendo la calma, no tomarse las cosas como algo personal y exponer los argumentos con tacto puede ser un gran comienzo.
Y por supuesto, la próxima vez que te encuentres con un conflicto, trata de recordar las claves para llegar a un acuerdo pacífico.
#5 -Asertividad
No podía faltar en esta selección de habilidades de comunicación básicas para equipos gerentes de escuelas y docentes la asertividad.
Esta habilidad ayuda a expresar opiniones y sentimientos de la forma más adecuada, respetando tanto a la otra parte como a uno mismo.
En realidad, esta habilidad es imprescindible en la convivencia, ya que permite dialogar desde el respeto, expresando lo que queremos decir sin llegar a herir los sentimientos de la otra persona.
Incluir la asertividad en tu repertorio de habilidades comunicativas te ayudará a defender tu punto de vista,disminuir los niveles de estrés (ya que no cargaremos la mochila con cosas que no nos corresponden) y construir relaciones laborales más saludables.
CÓMO PONERLA EN PRÁCTICA
Para comunicarte de forma asertiva, necesitas:
- Control: dar la información de forma calmada y serena.
- Claridad: ser lo más entendible posible (incluyendo ejemplos)
- Confianza: creer en tu capacidad de manejar la situación.
Evalúa la forma en la que te has comunicado hasta ahora y busca tus fallos. ¿Dices siempre que sí a todo? ¿Estás a la defensiva normalmente?
Con tus puntos débiles detectados, prueba a ir modificando poco a poco tu estilo comunicativo. Si te cuesta, puedes empezar practicando con personas cercanas a ti para ir cogiendo confianza.
Comunicación positiva en la escuela
La comunicación es la base del bienestar en la escuela, y de hecho un docente o director escolar que no domine sus habilidades de comunicación lo verá inevitablemente reflejado en su día a día.
Precisamente con este objetivo hemos creado el Workshop Comunicación positiva en la escuela*, un curso online intensivo para que gerentes educativos y docentes potencien el bienestar en sus centros mediante una comunicación más efectiva.
El workshop consta de lecciones en vídeo y recursos adicionales para que puedas entrenar tus habilidades de comunicación.
Cuéntame, ¿cuál de estas habilidades de comunicación crees que se te da mejor? ¿Y cuál es la que se te resiste? Me encantará leerte ????????